Jesús Alberto Hernández Escobedo
Las recientes elecciones en España y posteriormente en Mexico, evidencian una notable realidad : los partidos minoritarios no solo cuentan con el valor de sus votos sino que, además, tienen un valor estratégico agregado, que les permite, en el caso español, formar mayorías con los partidos tradiciones para la integración de los gobiernos autonómicos y municipales; en el caso mexicano para que, aliados al PRI, procurar el control de las cámaras legislativas.
Para ilustrar lo anterior examinemos el caso del Partido Popular. quedo como la fuerza mas votada, pero con un 10 por ciento menos de votación en relación a las elecciones del 2011,este partido perdió la mayoría absoluta en las 8 regiones autonómicas en donde dominaba sin necesidad de alianzas con otros partidos. Por tanto. ahora, deberá necesariamente aliarse con otras fuerzas políticas, en donde gano la elección legislativa para poder formar gobiernos, ya que los gobiernos son elegidos por los legisladores y no por votación directa.
Lo populares solo conservaron mayoría absoluta en la ciudad autónoma de Ceuta ubicada en territorio africano
En otro caso ilustrativo, el Partido Popular fue el mas votado para la alcaldía de Madrid, Esperanza Aguirre obtuvo el 34.4 de la votación, su competidora mas cercana fue Manuela Carmena, septuagenaria que viene del Partido Comunista pero que contendió por Podemos, obtuvo el 31.85 sin embargo, merced a una alianza entre Podemos y el PSOE, que reunieron mayoría de concejales, la titularidad de la Alcaldía fue para Carmena, con menos votos pero favorecida por la alianza Podemos y el PSOE
La nueva realidad política en España la constituyen los partidos minoritarios particularmente PODEMOS y CIUDADANOS, el primero de izquierda el segundo de centro izquierda, ambos incomodos aliados de los partidos tradicionales que los requieren para formar los gobiernos autonómicos y las alcaldías, ambos exceden su valor en votos y se constituyen en partidos estratégicos
En el caso mexicano, el Parido Revolucionario Institucional, partido gobernante en la segunda alternancia que tiene al titular del Ejecutivo federal, en estas elecciones el PRI obtuvo 203 diputados, numero insuficiente para lograr la mayoría simple y con mucho mas razón la calificada que requiere dos tercios de los 500 diputados,300 de ellos electos por mayoría relativa y 200 por el principio de proporcionalidad. Para subsanar esa desventaja el PRI recurrirá en primer lugar al Partido Verde que logro 47 diputados y ha demostrado su incondicionalidad al partido gobernante, pero 250 diputados aun no hacen una mayoría simple para lograrla recurrirán al PANAL que cuenta con 10 diputados y en la reserva tiene seguramente al PES que los entendidos aseguran tiene genes de los grupos hidalguenses en el poder y que terminará sumado al tricolor.
En cualquier caso, si el PRI tiene enfrente a la oposición mas o menos real, del PAN, del PRD y MORENA, no tendrá la mayoría calificada, nuevamente volvemos a nuestra hipótesis, en el caso mexicano el PRI requiere a los partidos menores para operar funcionalmente en el legislativo.
En todo este juego de la alianza entre partidos el patito feo es el PAN, difícilmente otros quieren asociarse con el, aunque no se descarta que el pragmatismo lo una a las izquierdas y eventualmente al Movimiento Ciudadano, todos ellos de diferente ideología que el PAN; hay un notable hueco en el electorado conservador que solo es representado por un menguado albiazul quien solo recogió el 21 por ciento de la votación.
Este momento político es el de los partidos chicos, de los que ya tienen registro y de los nuevos que lean el desgaste de los partidos tradicionales y se embarquen en la aventura de encontrar espacio para nuevas opciones.